Tanto hablar el sábado de metros cuadrados, propuestas de decoración y papel pintado en el cálido ambiente de una trattoria, que por el sabor de su canolos bien podría estar situada en cualquier pueblo siciliano, me inspiró a ir el domingo a visitar las obras de mi futura casa.
En la nada agujereada que había hace seis meses se levantan ahora 3 bloques y en el que corresponde a mi vivienda queda por construir sólo la tercera y última planta. Ya están los trasteros, los garajes y ya se podían ver los ladrillos apilados y listos para empezar con el siguiente paso.
Ahí queda el testimonio gráfico:
2 comentarios:
¡Qué buen ritmo lleva ese pisito! Dentro de nada fiestorro que te crió para inaugurar la nueva morada ;)
Siiiii!!...porque iba a hacer un poquito de fresco así sin tener la casa cerrada del todo, que si no...yo sacaba ya las cervezas!
Publicar un comentario